Síntomas de falta de vitamina D

1. Qué es la vitamina D y para qué sirve

La vitamina D es un nutriente esencial para la salud del cuerpo humano, ya que desempeña una variedad de funciones importantes, como el fortalecimiento de los huesos y el mantenimiento del sistema inmunológico. La vitamina D también conocida como vitamina del sol, engloba una serie de esteroles (vitamina D2 o calciferol, D3  o colecalciferol, D4, D5 y D6). Interviene en la formación de los huesos, así como en la absorción de calcio y fósforo en el intestino. 

¿Cómo se obtiene la vitamina D? La vitamina D es una vitamina soluble en grasa que se encuentra en ciertos alimentos y se produce en la piel cuando se expone a la luz solar, de ahí que se la conozca como la vitamina del sol. Los rayos ultravioletas favorecen la síntesis de la hormona encargada de ello en mayor o menor medida. En el caso de las personas más jóvenes, su absorción es más eficiente por la capacidad de su cuerpo. 

Existen dos tipos principales de vitamina D: D2 y D3. La vitamina D2 se encuentra en alimentos de origen vegetal, como hongos y levaduras, mientras que la vitamina D3 se produce en la piel y también puede obtenerse de la dieta, principalmente de pescados, huevos y lácteos. 

A pesar de que la obtención de esta vitamina es bastante asequible, la deficiencia de vitamina D es común en todo el mundo, especialmente en regiones de menos luz, y este déficit puede tener graves consecuencias para la salud.

2. Síntomas de falta de vitamina D

La deficiencia de vitamina D puede presentar síntomas sutiles o, incluso, presentarse de forma asintomática en las primeras etapas. Por ello, te presentamos los cinco síntomas más comunes de falta de vitamina D:

• Salud ósea y Osteoporosis: la vitamina D es importante para la salud de los huesos y los músculos, su déficit provoca dolor y debilidad muscular. Además, el déficit de esta vitamina también está relacionado con dolores de espalda y articulaciones.

• Fatiga y debilidad generalizada: son síntomas comunes de la falta de vitamina D, ya que esta vitamina es esencial para mantener los niveles de energía adecuados del cuerpo. 

• Cambios de estado de ánimo: unos buenos niveles de vitamina D juegan un papel importante en la regulación del estado de ánimo, y el déficit puede estar relacionado con cambios de estado de humor fuertes, la depresión o la ansiedad.

• Problemas de sueño y concentración: la vitamina D es importante para regular los ciclos de sueño-vigilia, por lo que una falta de vitamina D puede afectar la calidad del sueño y causar problemas para conciliar el sueño. Además, también se asocia a la dificultad para concentrarse afectando el déficit a la función cognitiva.

Problemas de crecimiento: en los niños, la deficiencia de vitamina D puede causar raquitismo, una enfermedad que causa deformidades óseas y retraso en el crecimiento.

3. Cómo aumentar la vitamina D

Como has visto, el déficit de vitamina D es bastante frecuente y puede ser peligroso de forma sostenida en el tiempo. Hay que tener en cuenta que la vitamina D es soluble en las grasas y se almacena en cuerpo, por lo que su consumo excesivo puede causar náuseas, vómitos, debilidad muscular, confusión, dolor, pérdida del apetito, deshidratación, micción y sed excesivas y cálculos renales. Las concentraciones sumamente elevadas de vitamina D pueden causar insuficiencia real, arritmia y hasta la muerte. Los niveles elevados de vitamina D se deben casi siempre a su consumo en cantidades excesivas a través de suplementos dietéticos. Nunca se recibirá demasiada vitamina D del sol porque la piel limita la cantidad de esta vitamina que puede producir. 

Hay varias formas en las que puedes aumentar tus niveles de vitamina D y mantener tu cuerpo en buena salud.

• Exposición al sol: la principal fuente de vitamina D es la exposición al sol. Cuando tu piel está expuesta directamente al sol, produce vitamina D en respuesta a los rayos UVB. Se recomienda pasar al menos 15-20 minutos al sol diariamente, preferiblemente en las horas de la mañana o al atardecer, cuando los rayos del sol son menos intensos. Aunque los protectores solares limitan la producción de vitamina D, los expertos en salud recomiendan usar aquellos que ofrecen un factor de protección solar (FPS) de 15 o más si la persona va a exponerse al sol por algo más que unos pocos minutos. 

• Consumir alimentos ricos en vitamina D: La vitamina D también se encuentra en algunos alimentos especialmente en pescados grasos como el salmón, la caballa y el atún. También se puede encontrar en alimentos fortificados como la leche, el zumo de naranja, los cereales y el yogur. Además, las verduras son fuente de otras muchas vitaminas que ayudan a nuestro organismo a funcionar a pleno rendimiento.

• Suplementos de vitamina D: Las dos formas de vitamina D disponibles en suplementos son D2 (ergocalciferol) y D3 (colecalciferol). Ambas aumentan la concentración de vitamina D en la sangre, aunque la D3 podría elevarla más y por más tiempo que la D2. Como la vitamina D es liposoluble, se absorbe mejor cuando se toma con una comida o una merienda que contenga algo de grasa.

• Hábitos alimenticios saludables: Al mantener una dieta saludable y equilibrada, puedes asegurarte de obtener suficiente vitamina D y otros nutrientes importantes. Incluye alimentos ricos en vitamina D como pescado y productos lácteos fortificados en tu dieta, y asegúrate de obtener suficiente calcio a través de alimentos como verduras de hoja verde, productos lácteos y suplementos en caso necesario.

Como has podido ver, la vitamina D es un nutriente crucial para el sistema inmunitario y la salud general del cuerpo. El déficit de vitamina D está asociado a una gran variedad de sintomatología y puede ser perjudicial para nuestra salud. 

Al seguir nuestros consejos: exposición diaria al sol, buena alimentación y hábitos de vida saludables, puedes aumentar tus niveles de vitamina D y mantener tu cuerpo activo y fuerte. 

Recuerda que si tienes preguntas o preocupaciones sobre tu ingesta de vitamina D, es importante hablar con un profesional de la salud para recibir asesoramiento personalizado.

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