15 trucos sobre cómo ordenar y organizar la cocina

Orden y cocina son dos términos que, cuando van unidos, son casi un sueño hecho realidad. Y es que, reconozcámoslo, no siempre es fácil mantener ordenadas nuestras cocinas por varias razones. La primera, porque la actividad constante en ellas es inevitable. La segunda, por la incontenible tentación de algunos cocinillas de hacernos con más y más aparatos de todo tipo para mejorar o agilizar nuestras creaciones gastronómicas. Y la tercera, por la falta de espacio a la que la mayoría tenemos que enfrentarnos. Sin embargo, una cocina bien organizada trae un sinfín de ventajas: nos permite saber dónde se encuentra cada utensilio en todo momento, maximizar el tamaño de la habitación incluso en las cocinas con menos metros cuadrados y obtener esas dosis de paz y equilibro de las que ya hablaba Marie Kondo. Si no sabes ni dónde ni cómo empezar a colocar las cosas en la tuya, hoy te damos algunos trucos y consejos para dar respuesta a la eterna pregunta: cómo organizar la cocina. Si además, también te interesa conocer cómo hacer que tu cocina sea más eficiente, te lo contábamos todo en este post.

1. Tira lo que no uses

También lo que esté roto o caducado. Puedes vaciar cajones, armarios y baldas para hacer la selección; ya pasaremos a colocarlo todo de nuevo una vez lo hayamos limpiado en profundidad. ¿Qué objetos son prescindibles? Seguro que puedes desprenderte de utensilios inservibles, de electrodomésticos que ya no funcionan o que nunca utilizas.

2. Clasifica

Es importante organizar por categorías y dedicar a cada cosa un espacio concreto. Es decir: las sartenes han de ir siempre con las sartenes, las tapas con las tapas y no mezclarse con las ollas; los tenedores, cucharas y cuchillos, en compartimentos separados; los vasos y las tazas pueden acumularse en forma de torre (o también puedes colgar las que lleven asa de la balda de la estantería del armario), pero deben evitar juntarse unos con otros para no romperse. Parece lógico, pero a veces con las prisas la comodidad de guardar todo en el primer hueco que vemos, es muy tentadora y nada eficaz para mantener el orden que queremos conseguir.

3. Utiliza cajones con distintos niveles

Ya que hablamos de cubiertos, hablemos de cajones. Probablemente en los tuyos quepa más de una bandeja por cajón, así que, si tu cubertería es abundante, mejor repartirla en dos y dejar en la balda superior, la que queda más a mano, los cubiertos que usas a diario. 

4. Ten siempre la encimera despejada

Es muy habitual acumular electrodomésticos que no usamos a menudo en la encimera, así como saleros, botes, especias o botellas de aceite. Te recomendamos guardar todo en armarios, y si son armarios cerrados, todavía mejor ya que darán mayor sensación de orden y limpieza. 

¡Inspírate con nuestras recetas!

Alcachofas rellenas de foie gratinadas con parmesano

4 personas

Fácil

25 min.

Chips de alcachofas crujientes

4 personas

Fácil

15 min.

Espárragos verdes gratinados

4 personas

Fácil

20 min.

5. Emplea cestas para organizar

No en todas las cocinas caben tantos armarios como nos gustaría, es cierto. Por eso, para almacenar algunas cosas pero manteniendo la encimera despejada, podemos ayudarnos de cestas y canastos de mimbre o metálicos o de un carrito supletorio con ruedas. Además de que estéticamente funcionan de maravilla, son muy prácticos cuando dudas sobre cómo organizar la cocina y que quede bonito.

6. Banda magnética para los cuchillos

Si también eres de los que guarda los cuchillos en un cajón sin orden ni concierto alguno, que sepas que una banda magnética sobre la encimera puede solucionarte la vida y, muy importante, evitar cortes inesperados. 

7. Baldas y verticalidad

¿Más ideas con las que puedes aprovechar las paredes si no dispones de espacio ni armarios suficientes? Puedes colocar una balda estrecha para tener las especias siempre a mano, un soporte en el que poner el papel de cocina o barras metálicas horizontales con ganchos en forma de S de las que colgar cubos para almacenar las cucharas de madera, trapos o guantes de tela.

8. Piensa con altura

Es cuestión de lógica: lo que utilices más a menudo, tenlo siempre a mano, y los aparatos a los que les des menos uso, guárdalos en los estantes superiores de los armarios. Si los tuyos llegan hasta el techo, aprovecha ese espacio; si no tienes esa suerte, siempre puedes utilizar cajas y cestos como almacenaje para que la parte de encima de tus armarios también mantenga un orden y no se dedique únicamente a acumular polvo.

9. Sácale partido a los huecos

Algunas cocinas no cuentan con armarios cerrados debajo de la encimera, lo que obliga a mantener un orden todavía más riguroso. Si quieres que tus utensilios y menaje no estén a la vista, puedes utilizar una tela bonita a modo de cortina para ocultar el interior de los huecos. También puedes colocar raíles para crear cajones extraíbles y aprovechar así, de una forma más cómoda, la profundidad de esos espacios. 

10. Aprovecha las puertas de los armarios

Es un hecho: los armarios que tienen baldas extraíbles son de los mejores inventos que se han logrado en mobiliario de cocinas. Pero los armarios más tradicionales también pueden ver maximizado su espacio a través del interior de sus puertas, de las que podemos colgar trapos en ganchos adhesivos, organizadores de tapaderas de ollas y sartenes, o cestas metálicas colgantes que cumplirán una función muy útil como estantería. 

11. Botes transparentes

Los paquetes cerrados con pinzas o gomas, son siempre una amenaza para la limpieza y para el orden de nuestras cocinas. Utiliza, como sustituto, botes y tarros transparentes, que además de resultar más cómodos y eficaces, pueden ser muy decorativos. 

12. El armario de debajo del fregadero

El armario de debajo del fregadero no es menos importante que el resto, y como tal, debes tratarlo con mimo y cuidado, sobre todo teniendo en cuenta que puede serte muy útil para almacenar productos de limpieza, trapos, esponjas o bolsas, que siempre debes guardar bien dobladas y almacenadas en una cesta o caja.

13. Organiza la basura

Existen armarios que tienen una estantería extraíble y corredera reservada para la basura, algo que es tremendamente útil. Pero si no dispones de esta comodidad, te recomendamos, sin lugar a dudas, invertir en un cubo de la basura que cuente con separación para reciclaje. Así evitarás acumular diferentes bolsas y cubos que acaban ocupando mucho espacio y dando una gran sensación de desorden a tu cocina.

14. Qué hacer con los trapos

Lo primero que debes preguntarte cuando te asalte esta duda es: ¿cuáles de ellos están, realmente, en buen estado? Quédate con los imprescindibles y guárdalos, bien doblados, en un cajón. Si no tienes espacio suficiente como para dedicarles un cajón entero, puedes colgarlos del interior de una puerta de armario, de un gancho en la pared o del mando del horno. 

15. No descuides la nevera ni el congelador

El frigorífico es un electrodoméstico al que debemos dedicarle especial atención cuando pensemos en cómo ordenar la cocina. Cuando toque el turno de organizarlo, es probable que te des cuenta de la cantidad de alimentos caducados y olvidados que se encuentran al final de tus estantes, un desperdicio alimentario al que puedes ponerle freno optando por productos utracongelados, que poseen una larga caducidad (mínimo 24 meses). Para evitar que esto suceda de nuevo, mantén el orden en las bandejas y cajones, y no solo nos referimos a los cajones de la nevera, también debes cuidar la clasificación de los del congelador. Puedes reservar, por ejemplo, un cajón para nuestras verduras ultracongeladas de Verleal y agrupar ahí nuestros productos bio, verduras y nuestras ayudas culinarias, y conservarlos sin ningún problema en su envase original. 

No es un refrán popular, pero podría serlo: no dejes para mañana la cocina que puedes ordenar hoy. Y sería un dicho muy sabio, ya que, como hemos visto, uno de los secretos sobre cómo organizar la cocina reside en mantener el orden día a día y en aprovechar al máximo cada uno de los espacios y rincones de los que disponemos. 

Compartir